Si anhelo algo lo tomo, ó al menos intento, a veces no sale, igual que las medias se rasgan, ó el examen ordinario reprobado, sí me llega igual lo tomo, me gusta me lo quedo, sino, juego un poco y lo suelto, así suelo ser con mis cosas ó lo que creo mío. Mira si quieres escucharlo tal y como pasó te parecerá algo bobo y cursi, así que mejor le meto ironía y un dialogo interior nefasto para hacerla más interesante, ehh?. Lo que pasa es que por más besos, y cogiditas que te eches te sentirás igual de sola, sabes que un orgasmo no tiene nada que ver con felicidad, es mas bien como… mmm como te lo puedo explicar… pues como lo que es un orgasmo. ¿Sábes que me da risa? El otro día busqué orgasmo en el diccionario y decía “culminación del placer sexual” Real Academia mi coño, Si tuviera una moneda por cada vez que me he revolcado sin venirme, pues no me pudriría en dinero pero seguro me compro un buen dildo.
Estaba en la sala, se prenden las luces, se levantan de su asiento, bueno ya vámonos, y mira, dos filas atrás esta la persona que por unos días pensaste que era el amor de tu vida, pero claro, te mando al coño y tu fingiste hacer lo mismo, así que no te queda otra cosa que pretender no verla y si el destino decide joderte un poco y encontrártela en el pasillo, saludo de rutina: mueves tu mano, evitas el contacto visual, y pretendes que estas tan ocupada con tus problemas existenciales que su presencia resulta totalmente indiferente, cuando tus únicos conflictos son largarte de su vista y escoger que puta blusa te pondrás mañana.
Y le sigo dando vueltas a la misma mierda, eso de la vulnerabilidad y no, no se trata del puto amor, se trata de mi orgullo, por más patético que se escuche, digo a fin de cuentas a mi que más me daba, después de haber desnudado mi alma que le costaba una follada, ya sabes, de esas que solo duran dos minutos, así como que te escupen en la cara y aún así quedas satisfecha con una sonrisa de pendeja, como si eso significara haber poseído o tenido cerca alguien, no significa coño, ah pero como tienes a los cabronsitos rogando por una revolcada, bueno, eso no importa, lo que interesa es que me apodaron sexo casual y eso trae algo de condena a la hora de buscar algo más trascendente y bueno, todo termino en frivolidad, asco, rechazo, digo si estoy tan fea no es mi culpa, pero seguro a que ese cigarro
afterwards hubiera sabido a amor.
